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Alexandra Kastowsky: Un ejemplo de resiliencia

Alexandra Kastowsky es de profesión instrumentista quirúrgica y técnico de enfermería. Vende viajes a La India, Nepal, Bután, Sri Lanka, Islas Maldivas, Tailandia, Vietnam y su gran pasión es la escritura. Vive en la ciudad de Alicante con una parte de sus hijos y ha escrito varios libros. Tiene un proyecto colectivo sobre migración y tiene en mente escribir otras obras más

 

R.P.- Cuéntales a nuestros lectores de que parte eres y porque te encuentras dentro de un grupo relacionado con argentinos

A.K.- Soy de Chile y el grupo donde me encuentro es de expatriadas, mujeres de habla hispana. Donde también se hallan personas de Chile. Allí hay un 90% de argentinas, porque entiendo que lo iniciaron dos chicas argentinas. Y claro, la comunidad es muy grande. El grupo es para hispanoparlantes.

 

R.P.- ¿Cómo te sientes con los argentinos?

A.K.- Bien, a mí me encantan, de verdad. Cuando vivía en Chile es triste a veces escuchar que no se llevan bien o hay ciertos aspectos en los que compiten mucho y no se quieren. Pero a mí siempre me han gustado los argentinos y he ido muchas veces a aquel país. Me encanta Buenos Aires, me encanta Mendoza, me encanta todo, creo que son personas muy buenas. Nunca he vivido en Argentina, pero tengo un tío que lleva toda la vida allí, el hermano de mi madre también y habla como un argentino más.

 

R.P.- ¿Hace cuánto tiempo estás en España?

A.K.- Llevo cuatro años y medio. Llegué en septiembre del 2019, justo antes de la pandemia. Llegué cuando fue el estallido social en Chile, que fue en octubre. Yo llegué un mes antes a España y fue como una caricatura en mi cabeza porque me imaginaba en un avión volando y mirando por la ventana y viendo cómo quedaba la embarrada en Chile. A partir de ahí me empezó a llamar mucha gente, personas que yo no conocía para pedirme consejo de cómo salir de Chile, porque de verdad que Chile estaba mal. Me vine justo a tiempo, fue una corazonada. Pero detrás de eso vino la pandemia y entonces para mí fue súper positivo. Es raro decirlo, pero tuve un tiempo de mucha calidad con mis hijos encerrados en la casa, en pijama, todo el día bailando. Miraba por la ventana y la gente cantaba a las ocho en punto. Cantaban el himno de España que me lo aprendí y lo cantaba con mis hijos. Pero fue un tiempo muy bonito. Al final la vida es como tú la quieras ver.

 

R.P.- ¿Esa frase la adaptas en tu libro?

A.K.- En el libro yo siempre digo que los “mal llamados problemas” al final son portales de crecimiento, de aprendizaje y la vida es lo que tú quieres ver.

 

R.P.- ¿Lo has escrito desde Chile? ¿Cómo surgió?

A.K.- En Chile cuando empecé a vender mis cosas, le decía a la gente que todo lo que me sucedía lo voy a escribir. Entonces, cuando llegué a Europa, la época de pandemia me sirvió para empezar ese proyecto de libro que había en mi cabeza. Tomé un curso sobre el mundo editorial. No era de escritura, sino que te adentraba en ese mundo. Las editoriales por dentro, las organizaciones, etc. y ese curso me ayudó para hacer una estructura de mi libro. No es tan fácil como uno cree. No te enseñan a escribir porque la gente que toma este curso ya son escritores. Eso me sirvió igual, pude hacer el índice y de hecho hay varios capítulos que al final no los escribí, pero me pude ordenar.

Empiezo a redactar mi viaje como tal, qué fue lo que detonó que yo tomara esa decisión, que fue un 5 de abril, un día antes del cumpleaños de mis mellizas. Y para poder estructurar bien el libro, por suerte no había borrado ningún mensaje de WhatsApp de esa época. Me tocó leerme todos esos mensajes que había hablado con tanta gente y ver todo lo que yo había conversado en esa época y de ahí fui ordenando cronológicamente mi libro. Me tocó mirar desde un año y medio antes de venirme.

En ese tiempo de planificación viajé a Rusia, pasé por Dubai y allí conocí una chica chilena que me sugirió que me viniese a España por mis temas particulares y por el idioma, ya que no tenía claro a dónde irme para salir de Chile. Volví con otra mentalidad, Rusia me hizo reflexionar mucho. Un año después yo ya estaba tomando el avión con mis hijos hacia aquí.

Fue una locura porque tuve que traspasar muchas barreras en Chile para poder salir con mis hijos. El papá no estaba de acuerdo y tuve que luchar un poco con eso, otro tema es la familia de él. Tienes que leer el libro y ver la lucha a que uno se expone.

 

Alexandra Kastowsky con sus libros
Alexandra Kastowsky con sus ejemplares / Foto Lorena Ávila

 

R.P.- ¿El libro hace cuanto está en el mercado?

A.K.- El libro salió a la venta hace más de un año. Ese es mi primer libro, se llama ADSUM, Estar Presente Aquí y Ahora. ADSUM es una palabra en latín qué significa estar presente en el momento presente. Le puse ese título porque un día estaba conversando con una amiga y estábamos mirando unas cartas parecidas a un tarot. Cartas muy bonitas en la que saco una y decía esa palabra del que lleva de nombre el libro. Nos miramos por lo sorprendida que habíamos quedado y empecé a investigar. Me encantó la palabra y me di cuenta que cuando llegué a esta tierra del mediterráneo, todo me salió bien porque yo estaba presente en el momento presente. Dejé atrás todo el pasado, solo que lo tenía que escribir y tampoco proyectaba tan lejos. En el fondo yo pensaba ¿Qué presente quieres en tu futuro?. Otra manera de mirar el futuro no significa qué quiero en el futuro, sino qué presente quiero para después. Y hoy en día trabajo para eso, para mi próximo presente. Entonces me encantó esa palabra para el libro, porque todo el tiempo en el libro yo necesitaba vivir ese momento. Aunque proyectaba un presente que quería en el futuro.

 

R.P.- ¿Has tenido algún reconocimiento por tu obra?

A.K.- Me han pasado cosas. Sí, me lo han reconocido mucho. He hecho un par de entrevistas que andan por la web. Llegué a una editorial muy pequeña que me gustó y le di la oportunidad. Así, sintiendo que mi libro era muy valioso, la dueña me llama y congeniamos. Pero la dueña falleció y yo nunca vi las regalías. Mi libro se ha vendido bastante, pero yo no tengo idea cuántos, ni he recibido nunca nada por el libro, porque la dueña ya no está más y estamos solucionando ese tema. Es una situación rara. En este momento estoy viendo de negociar mi segundo libro con otra editorial y sacar una nueva edición más ordenada.  Este libro sí que está muy bien enfocado.

 

R.P.- ¿Ese segundo libro es la continuación del primero?

A.K.- No, es un libro que hicimos entre 20 escritores, es un libro colectivo y se llama Vivir Mejor Es Posible. Y la temática se encausa a que cada uno de nosotros eligió un tema y yo opté hablar sobre el perdón. Si tú lees vas a comprender por qué elegí ese tema. Es un libro que te ayuda a vivir mejor porque habla del éxito, de la felicidad, la libertad, el reloj del corazón, la culpa, entre otros. Esta compuesto por 20 capítulos independientes y de mas de doscientas páginas que lo hace de una lectura ligera. El tema del perdón automáticamente uno piensa en la gente que tiene que perdonar, pero, ¿y cuánta gente te tiene que perdonar a ti también? Al final uno cree tener la razón en muchas cosas, pero ¿Cuántas veces hemos herido sin querer? Cuando somos pequeños y más burlones, por ejemplo. Yo toco los cuatro perdones: Te perdono, Me perdonas, Te pido perdón, Me pido perdón.

 

R.P.- Estilo Ho´oponopono

A.K.- Sí, a mí me encanta este segundo libro porque también al escribirlo descubrí muchas cosas. Cuando escribes sobre un tema buscas mucha información sobre ello, eso fue una invitación a investigar acerca del perdón para escribir este libro y la verdad es que a todos mis compañeros literatos nos ha servido mucho esta obra. El libro es bien cosmopolita, porque hay gente de México, de Chile, de diferentes partes del mundo. El libro también nació hace un año. Y tengo dos libros más que aún no han sido editados, además un proyecto colectivo.

 

“Una manera de mirar el futuro no significa qué quiero en el futuro, sino qué presente quiero para después”

 

R.P.- Cuéntame

A.K.- Hay un libro que quiero ponerle Ágape, porque simboliza el amor. Es decir, está el amor fraternal, el amor de pareja y ágape es como vivir desde el amor. También hay otro libro que se titulará Yo nací feliz, ya que un amigo me ha sugerido que tengo que escribir desde ese título porque es mi esencia de todas las historias que le cuento. Es uno de mis mejores amigos que tengo por España y es argentino. Es un amor que le tengo como hermano, es un amor fraternal. Entonces, entre Ágape y Yo nací feliz, tengo un proyecto de libro colectivo que es un libro de inmigrantes. En el que cada persona que ha salido de su país y ha llegado a España va a aportar un capítulo. La idea es que lo lea la gente, los inmigrantes o los que tienen ganas de salir de su país. Un poquito inspiracional. Pretendo que sea un libro con historias muy bonitas y otras con capítulos más fuertes, como el caso de un femicidio que ha sucedido en España,  pero se esta viendo la posibilidad de que se autorice para poder incluirlo.

En el fondo el libro va a mostrar una realidad muy fuerte que la gente cree que, porque se está en Europa o se está en Estados Unidos, por ejemplo, tiene la vida maravillosa. La vida del migrante es dura muchas veces, otras veces diferente. El ejemplo de Estados Unidos lo expongo porque viví un año allí. Cuando no tienes el idioma se te pone súper difícil. Entonces mucha gente cree que porque estoy en Europa tengo una vida maravillosa y la tengo, pero no por estar en Europa. La tengo porque yo creo eso, lo cual no significa que no tenga problemas o “mal llamados problemas”, he tenido que pasar muchas cosas y aguantarme muchas otras también.

 

R.P.- ¿Con que sabor de boca nos despedimos?

Si crees que puedes, puedes. Si crees que no puedes, no podrás. Hay que creer en si mismo, hay que amarse, pero hasta la última célula de ti, tienes que amarte mucho. Hay gente que me dice que lloró con mi libro y yo no procuro hacerle llorar a nadie. Lo que yo pretendo, que la gente vea que pese a todo lo que tú llamas problemas, siempre puedes lograr lo que te propongas. Todo lo que uno se propone es suyo. Y cuando dudas ya estás poniendo barreras. Las barreras están en la mente. No hay nada en el mundo que te pueda frenar. Cuando tú quieres algo, tienes que quererlo, sentirlo, vivirlo aquí y ahora. Eso es lo que quiero transmitir.

 

 

Lorena Ávila